El mercado laboral evoluciona forzado por el factor tiempo y las nuevas necesidades sociales y económicas. Es por ello que algunas profesiones que hace décadas eran esenciales y en donde se empleaban millones de personas, hoy están quedando desplazadas por las nuevas tecnologías y los cambios a nivel global.
Las formas en las que el hombre ocupa su tiempo a cambio de dinero han variado mucho a través de la historia. En las últimas décadas, los cambios se han acelerado debido a múltiples factores sociales, económicos y tecnológicos, produciendo un gran impacto en aquellas profesiones y oficios que solían ser un clásico.
Si bien cada país responde ante su propio contexto y necesidades, a nivel global hay ciertas profesiones y oficios que están en vías de extinción. De acuerdo con el US Bureau of Labor Statistics, organización que analiza la evolución del empleo, se puede realizar una proyección sobre los trabajos donde se perderán más puestos en los próximos 10 años, algunos de ellos son:
Operadores telefónicos de información: antes de la expansión de Internet, las personas llamaban a diversos números de teléfono para encontrar información específica que no estaba en cualquier guía telefónica. En la actualidad, estos servicios están desapareciendo y terminarán por extinguirse cuando Internet llegue a todos.
Carteros: debido al surgimiento del correo electrónico, el envío de cartas a través del servicio postal se ha visto muy reducido. Lo que no para de crecer es el envío de paquetes por compras de Internet, por lo cual muchos carteros han tenido que readaptarse y abandonar su vieja profesión para dedicarse a esta.
Agentes turísticos: cuando se quiere viajar, la mayoría de las propuestas se pueden encontrar en Internet y se puede personalizar de acuerdo a los gustos y preferencias de cada uno. El papel de agente de viajes, como el local comercial para realizar estas transacciones, ha quedado desplazado. Los profesionales de este rubro se ven obligados a reinventarse y brindar un valor agregado a cada propuesta.
Zapateros: los cambios acelerados en la moda y los nuevos materiales con los que se realizan los calzados, ha generado que estos tengan menos vida útil para quienes los usan. En este contexto, la mayoría de los reparadores de calzados desaparecerán de aquí a diez años, porque las personas ya no arreglarán sus zapatos cuando se rompen: los tirarán y comprarán unos nuevos.
Costureros y operarios textiles: las profesiones relacionadas a la industria textil se verán cada vez más afectadas, por el traslado de la producción a Asia, donde la mano de obra es muy barata. Es probable que las máquinas sean autosuficientes, por lo cual no se necesitará de operarios ni costureros para dirigirlas o indicarles patrones de corte.
Relojeros: al igual que los zapateros, los relojeros se encuentran hoy en peligro de extinción. La cultura actual de “usar y tirar” impulsará a que los relojes no sean reparados, sino descartados y sustituidos por unos nuevos, económicos y con poca vida útil. El uso del celular es otro factor que ha desplazado el uso del reloj: casi nadie usa un reloj pulsera porque puede ver la hora en su pantalla móvil.
Técnicos de impresión: si bien hay quienes siguen defendiendo el formato papel, este no tiene la misma importancia ni expansión que hace algunas décadas. Quienes trabajan en imprentas o casas de diseño como técnicos en impresiones, sufrirán las consecuencias de la digitalización perdiendo numerosos puestos de trabajo.
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