Desde que iOS11 debutó en septiembre de este año, las quejas de los usuarios de iPhone se han multiplicado. Los que tienen un iPhone 5s, un iPhone 6 o un iPhone 6s aseguran que sus terminales funcionan a fuerza con la nueva versión del sistema operativo. Y las sucesivas actualizaciones no han hecho más que empeorar la situación.
Pero, ¿qué provoca esta desagradable situación? ¿iOS 11 es tan diferente a iOS 10 como para necesitar muchos más recursos? Parece que la respuesta es mucho más compleja.
Según un informe elaborado por Firstly Primate Labs y por el desarrollador de aplicaciones Guilherme Rambo, los iPhone antiguos funcionan peor con iOS 11 por una especie de mecanismo interno que solo sirve para eso, para que funcionen peor. Al menos eso es lo que piensan los amigos de las conspiraciones, porque otra intepretación de ese sistema es que esté ahí para preservar la vida útil del aparato, ya que al ir más lento consume menos energía.
Este sorprendente descubrimiento, del que se han hecho eco medios como The Guardian, tiene solución: solo hay que cambiar la batería del teléfono para que vuelva a funcionar con normalidad.
Tanto John Poole (de Firstly Primate Labs) como Guilherme Rambo han encontrado en las tripas de iOS11 líneas de código que hacen que el gadget consuma más recursos y de esta forma descompensar el funcionamiento general del terminal: como la batería no funciona de manera correcta, el procesador no es capaz de asumir la carga de trabajo que antes completaba sin problemas, ralentizando el funcionamiento general del terminal.
El descubrimiento de Poole se produjo tras hacer pruebas de benchmark (rendimiento) a su iPhone 6s antes y después de cambiar la batería. Y loo resultados fueron de lo más claros: tras colocar la nueva pieza, el teléfono funcionó el doble de rápido que antes. Es más, según él su móvil empezó a funcionar como si fuera completamente nuevo.
Pero no solo los iPhone antiguos sufren este problema. El iPhone 7, un smartphone que debutó en septiembre de 2016, también está sufriendo con iOS 11. Sobre todo con la última versión, las 11.2 que parece mostrar el inicio de su decadencia en cuanto a rendimiento, algo sorprendente en un teléfono que apenas tiene 16 meses.
Las baterías de los teléfonos móviles están diseñadas para durar unos 500 ciclos de carga-descarga completos, algo así como unos 2 años de uso intensivo. A partir de ese momento, su rendimiento disminuye y afecta al resto del aparato, que empieza a funcionar de una manera más lenta.
Apple no ha realizado ningún tipo de declaración sobre este asunto, pero el pasado mes de noviembre inició un programa de cambio de baterías para teléfonos iPhone 6s que se apagaban cuando quedaba un 40% de autonomía.
Así que si tu iPhone va lento con iOS 11, la forma de solucionar esta situación es cambiar la batería. Al menos eso es lo que aseguran Firstly Primate Labs, Guilherme Rambo y un montón de usuarios de Reddit que están experimentando las bondades de esta reparación.
