Con cada triunfo, los Indios de Cleveland están más cerca de hacer historia. Persiguen un antiguo y extraño récord impuesto hace 101 años, que incluye una pequeña mancha.
Quizás no es tan pequeña. Es una mácula de Grandes Ligas.
La racha de 26 victorias consecutivas lograda por los Gigantes de Nueva York en 1916 incluye un empate.
”Creo que sabía eso”, indicó el cerrador de los Indios, Cody Allen.
No todos están al tanto de es peculiaridad. Y los Indios, que han hilvanado 20 triunfos seguidos, se están aproximando a la marca, lo que ha generado preguntas sobre por qué se considera que ésta pertenece a un equipo que consiguió 12 victorias en fila y firmó un empate antes de ganar otros
No hay duda de que no hay equipo más encendido que los Indios de Cleveland.
El día de hoy llegaron al encuentro contra los Tigres de Detroit con una racha de 19 victorias consecutivas, a sólo una de la mejor marca en la historia de la Liga Americana, impuesta por los Atléticos en la temporada del 2002.
Con un gran trabajo de su mejor lanzador, Corey Kluber, y el siempre oportuno bate de Francisco Lindor, los Indios llegaron a la codiciada cifra de 20 victorias.
Ahora los muchachos de Terry Francona buscarán superar el mejor récord de victorias consecutivas de todo el béisbol, el cuál pertenece a los Cachorros de Chicago de 1935, cuando llegaron a 21 triunfos sin derrotas.
Existe otra marca que la tribu puede romper, la cuál fue impuesta hace 101 años, pero incluye una pequeña mancha. La racha de 26 victorias consecutivas lograda por los Gigantes de Nueva York en 1916 incluye un empate.
Los ganadores de la Liga Americana en 2016 se unen a una lista que tenía hasta este martes sólo tres equipos; las organizaciones con al menos 20 juegos ganados en fila: los Gigantes de 1916, los Cachorros de Chicago de 1935 (21) y los Atléticos de Oakland de 2002 (20).
