Andrés Manuel López Obrador, virtual candidato presidencial electo y su equipo tienen el propósito de hacer crecer la economía 6% cuando su administración termine y así romper con la tendencia del promedio anual de 2.5% de los últimos 40 años.
Para lograrlo el Plan de Nación 2018-2024 de la coalición Juntos Haremos Historia contempla distintas promesas, que reiteró el candidato en su primer discurso como virtual ganador de la contienda a la presidencia, y replicadas en entrevistas con medios de comunicación por Carlos Urzúa, quien será secretario de Hacienda, en la próxima administración federal.
1.- Aumentar el salario mínimo. La propuesta es incrementarlo 15.6% cada año, para al final del sexenio llegar a los 171 pesos diarios, más la inflación que se haya generado en el periodo.
En corto plazo, esta medida ayudaría a mejorar el poder adquisitivo de las familias mexicanas e impulsar el consumo interno, no obstante, se restaría atractivo al país pues los bajos costos laborales son un aliciente para la inversión extranjera, considera Bank of America Merril Lynch en un reporte.
Actualmente, el salario mínimo es de 88.36 pesos diarios. En la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), los equipos de Estados Unidos y Canadá han solicitado aminorar las diferencias salariales con México, tras el objetivo de competir por inversión en términos más parejos.
2.- Apoyos económicos para adultos mayores y jóvenes. Propone una pensión universal para todos los adultos mayores, 1,500 pesos al mes, incluyendo a pensionados del IMSS e ISSSTE. Para ello se requeriría destinar más de 78,000 millones de pesos al año en el presupuesto público.
Becas para jóvenes que no estudian, ni trabajan (ninis), de 3,600 y 2,400 pesos mensuales, a 300,000 jóvenes al año, parlo lo que se requieren 109,490 millones de pesos (mdp).
En el corto plazo estos apoyos incrementarían el consumo interno, dinamizando la actividad económica del país, considera Oxford Economics.
No obstante, los costos de estos programas, pueden contradecir el objetivo de no incrementar la deuda, por lo que, los recursos necesarios tendrían que obtenerse de ajustes al presupuesto, una tarea que no es sencilla, y puede llevar más de un año, consideró Héctor Villarreal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
3.- Congelar los precios de las gasolinas en términos reales. Esto significa que los precios de este combustible no pueden subir más que el índice de inflación general en México.
Si bien es una medida que beneficiaría el ingreso y consumo de las familias mexicanas, puede afectar la balanza financiera de México. Si los precios de referencia internacionales suben por arriba de la inflación en el país, el gobierno tendrá que poner recursos para que los márgenes de los precios prometidos se mantengan, explicó Nymia Almeida, analista de Pemex en la agencia calificadora Moody´s
4.- Disminuir el IVA en frontera. Con el objetivo de incrementar el consumo en esta zona, el proyecto del candidato electo contempla pasar ese impuesto de 16% a 8%.
El director del CIEP consideró que esta promesa pone en riesgo el balance en las finanzas públicas de México, pues significa una menor llegada de recursos tributarios para el sector público, situación complicada, pues cada año el presupuesto se ve más presionado por el gasto en pensiones y el pago el servicio de la deuda pública.
Fuente: Expansión.mx
