Redacción, Veracidad News
Santiago fue uno de los doce apóstoles del Señor, el cual junto a sus padres Zebedeo y Salomé y su hermano Juan se dedicaban a la pesca en Cafarnaún, junto al Mar de Galilea.
Su nombre en hebreo era Jacob y su derivación al latín, Sant Iacob. Se dice que los españoles en sus batallas lo mencionaban tantas veces en busca de ayuda que las dos palabras terminaron uniéndose formando una sola: Santiago.
Entre los apóstoles también era conocido como el mayor, para distinguirlo de Santiago el Menor, que era más joven que él. Junto a su hermano fueron llamados por Yeshúa para formar parte del grupo de los doce apóstoles, “Y pasando de allí, vio a otros dos hermanos, Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano, en la barca con Zebedeo su padre, remedando sus redes; y los llamó. Y ellos, dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron”. Mateo 4:21-22.
Se convirtió en uno de los apóstoles más importantes para el Señor, debido a que estuvo presente en dos momentos claves; la transfiguración en el monte Tabor y la oración en el huerto de los olivos.
“Seis días después, Yeshúa tomó consigo a Pedro, a Jacobo y a Juan su hermano, y los llevó aparte a un monte alto; y se transfiguró delante de ellos, y resplandeció su rostro como el sol, y sus vestidos se volvieron blancos como la luz”. Mateo 17:1-2.
“Entonces llegó Yeshúa con ellos a un lugar que se llama Getsemaní, y dijo a los discípulos: Sentaos aquí, mientras voy allí y oro”. Mateo 26:36.
La pasión y la valentía que demostró lo hizo merecedor de un sobrenombre otorgado por el propio Mesías “A Jacobo, hijo de Zebedeo, y a Juan hermano de Jacobo, a quienes puso por sobrenombre Boanerges, esto es, hijos del trueno”. Marcos 3:17.
Después de la Ascensión de Yeshúa, se distinguió como una de las principales figuras entre el grupo de los Apóstoles. Por eso cuando el rey Herodes Agripa se propuso acabar con los seguidores de Cristo, lo primero que hizo fue mandar a cortarle la cabeza, y encarcelar a Pedro.
“Y mató a espada a Jacobo, hermano de Juan”. Hechos 12:2.
