Tiburones de Cancún es el segundo hogar de poco más de 13 extraordinarios deportistas, quienes a través de esfuerzo, dedicación y pasión por lo que hacen colocan en alto el nombre de Cancún, siendo este pedacito de tesoro caribeño caracterizado no sólo mágicos arenales, sino por contar con talento deportivo.
Pedro Hernández, es uno de los integrantes del equipo de básquetbol. El originario de Ciudad de México sufrió un accidente cuando tan sólo tenía 18 años; este suceso le arrebato la movilidad en las piernas, pero no el amor por la vida.
Resaltó que nunca practico ningún deporte antes del incidente, pero ahora está enamorado de su pasatiempo. Además, realizar actividad física, Pedrito como lo llaman sus amigos y conocidos es policía de tránsito desde hace poco más de una década.
El grupo de deporte adaptado ha participado en competencias locales y estatales, cabe resaltar que en 2008 Tiburones de Cancún fue el primer equipo de básquetbol campeón a nivel nacional.
Los amantes del deporte aseguraron que para ellos pertenecer al grupo va más allá de un simple hobby, ya que son como otra familia.
Los elementos de tiburones son desde sastres, estudiantes, hasta taqueros, todos ellos con mucha capacidad en cualquier ámbito. En conjunto tienen el mismo objetivo, demostrar que una silla de ruedas no es impedimento para dominar una cancha o un balón.
Tres veces por semana entrenan en el deportivo Jacinto Canek, de seis a ocho de la noche. Quien dirige al equipo es Javier Rubio, entrenador con 20 años de trayectoria. Hace cuatro años se especializó en deporte adaptado.
Este conjunto de jugadores a través de su ejemplo demuestra que el querer es poder, además que no hay impedimento para hacer lo que más les gusta.
Con imágenes de Raymundo Labastida e información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.
