La función del profeta de Yahweh 

En esta ocasión abordaremos la palabra “profeta”, la cual observamos recurrentemente en el llamado “Antiguo Testamento”, Tanak en hebreo, y vigente en el “Nuevo Testamento” como parte de los cinco ministerios para edificar al cuerpo del Mesías. En la antigüedad diversas culturas de Oriente contaban con personas que fungían como adivinos, agoreros, médiums, hechiceros y brujos a los cuales llamaban profetas y/o sabios, no así a las personas que Yahweh llamaba para fungir como sus profetas.

Naví (profeta/delegado/gobernador) palabra hebrea que significa: Portavoz, vocero, en griego es prophetes y significa el que habla en pro de. Son personas que Yahweh llama para proclamar justicia y libertad. Esta palabra, Navi la vemos aplicada en Abraham, “…porque es profeta, y orará por ti, y vivirás…” (Génesis 20:7). El discurso que trasmitían los que eran llamados por Yahweh, no representaba necesariamente una predicción de eventos futuros, sino la proclamación de la palabra (TORA) en forma de exhortación o advertencia de disciplina y/o juicio que seguía a la transgresión. Como “voceros” de Yahweh, los profetas no escogían esta profesión, sino que eran elegidos -aún contra su voluntad- para someterse en obediencia, vemos casos en la palabra de ello, pues el propósito era ser usados para transmitir el mensaje divino, tarea asignada que les apartaba de la multitud para cumplir con la misión por lo cual fueron creados. (Deuteronomio 5:4/1 Reyes 19). Movidos por Yahweh quien los vinculaba a cargos de poder y cercanos al gobierno. (Daniel 2:48). La importancia de éstos radica en el llamado que tenían para recibir la interpretación de la Tora con una nueva conciencia y/o limpio entendimiento y así penetrar a todas las esferas de la vida y hacer oír la voz de Yahweh en cada rincón de la tierra, siendo su único objetivo, dar a conocer su Nombre, haciéndoles comprender el propósito de los sacrificios: OBEDIENCIA Y JUSTICIA.