La vivienda en México – Veracidad News

Es uno de los principales problemas económicos y sociales del país, y es que se estima que el 75% del uso de suelo corresponde al de los hogares.

Redacción, Veracidad News

La vivienda en México, es uno de los principales problemas económicos y sociales del país, y es que se estima que el 75% del uso de suelo corresponde al de los hogares.

Aunque es uno de los principales activos que forman el patrimonio de las familias, de acuerdo con información de la Universidad Nacional Autónoma de México la mayor parte de la población no tiene acceso a financiamientos que les permitan adquirir una casa, lo que propicia que solo un sector minoritario participe en ese mercado.

El informe detalla que desde el punto de vista económico, la vivienda es un motor de actividad, basado en la industria de la construcción y sus efectos de arrastre. Además, debería tener una mayor importancia para la economía del país ya que alrededor del 85% del PIB lo producen las ciudades, destacando las principales zonas metropolitanas, 17 de ellas, que aportan el 50% de la producción nacional.

Actualmente se considera a la vivienda un problema nacional que desgraciadamente desde la perspectiva económica no ocupa el lugar que debiera tener por la falta atención de los profesores e investigadores en la especialidad.

Para ello, es indispensable difundir de manera sistemática los planteamientos más importantes sobre la política de vivienda así como la documentación que recoja la experiencia nacional e internacional en la materia a fin de impulsar la investigación y el conocimiento en esta área tan importante para el desarrollo del país.

De acuerdo con proyecciones recientes, se calcula que para el año 2030 al menos 75 por ciento de nuestra población habitará en ciudades y sus zonas metropolitanas, por lo que se requiere de nuevas viviendas, con suelo apto, infraestructura y servicios básicos para la población.

En nuestro país esta situación se reflejará con mayor fuerza en la población que fluctúa entre los 20 y los 59 años de edad, lo que llevará a una profunda transformación de nuestra pirámide poblacional, ya que la demanda de vivienda superará en 300 por ciento el crecimiento demográfico.