Recursos humanos, infraestructura hospitalaria, el acceso a medicamentos y la democratización de los servicios son las cuatro áreas que muestran las carencias que sufre actualmente el sistema de salud mexicano y que representan una oportunidad que algunos emprendedores ya comenzaron a tomar.
Así lo refiere el estudio ‘Oportunidades de emprendimiento en el sector salud en México’, elaborado por Endeavor México y la empresa de investigación de mercado, Atlantia Search, que hace un llamado a tomar medidas a fin de prevenir “un colapso financiero y social que será inevitable” en los próximos años.
“Es un sector que tiene muchas imperfecciones y desafíos”, aseguró el director general de Endeavor en el país, Vincent Speranza, durante la presentación del informe.
De los 40,000 médicos que presentaron su examen para obtener la residencia en un hospital público o privado en 2016, solo 5% logró entrar. Esto suma a que en general no hay especialistas suficientes para cubrir lo que demanda el sistema de salud en el país, pues la mayoría se concentra en las principales urbes como la Ciudad de México y Monterrey.
Por otra parte, el estudio revela que pese a la existencia de 4,780 hospitales a nivel nacional -71.5% privados y 28.5% públicos-, además de los casi 30,000 establecimientos de salud entre unidades clínicas, consultorios y estancias, estos no se traducen en mejores servicios, pues la gente carece de acceso por costos, disponibilidad de espacio o bien, estos no cumplen con normas oficiales.
En cuanto a los fármacos, cuyo costo o uso depende de la enfermedad, están lejos de relacionarse con la eficacia en el tratamiento de los pacientes. Además, solo 5.6% de la población tiene acceso a gastos médicos mayores a través de las aseguradoras, mientras que el gobierno solo los proporciona a 50%. Esto significa que el resto acaba pagando la atención médica de su bolsillo.
El problema, especificó la especialista en salud de Endeavor, Jimena Labbé, no es la inversión en el sector tanto pública y privada, sino en la forma en que se utiliza el capital en beneficio de la población. “No es bien utilizado”, afirmó.
