Cambiar de teléfono constantemente mata al planeta

De acuerdo con científicos canadienses, los consumidores cambian de smartphone cada dos años, sin saberlo, esta transacción está afectando gravemente al planeta y amenaza con socavar los esfuerzos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

En un artículo de investigación publicado a principios de 2018, el profesor asociado de la Universidad de McMaster, Lotfi Belkhir, junto con el reciente graduado de la facultad de ingeniería Ahmed Elmeligi; concluyeron que el sector de tecnología de la información y las comunicaciones a nivel mundial, incluidos los dispositivos de consumo, se encuentra en medio de una rápida explosión de su huella de carbono.

Si bien todo el sector representó solo del 1 al 1.6 por ciento de las emisiones globales de carbono en 2007, para el 2040, representará el 14 por ciento de las emisiones, según los investigadores. Eso equivale a la mitad de las emisiones del sector del transporte.

Según los investigadores los centros de datos y las redes de comunicaciones serán los que más contribuyan a la huella de carbono de la tecnología, pero los teléfonos inteligentes dañan más que de todos los dispositivos de comunicaciones.

Usar un teléfono inteligente no es particularmente intensivo en carbono; más bien, la extracción de metales raros utilizados en los teléfonos inteligentes y el proceso de fabricación son los culpables.

A lo largo de la vida útil de un teléfono, el 85 por ciento de las emisiones de carbono que causa se producirá antes de que el consumidor compre el producto, hallaron los estudiosos de McMaster.

Es por eso que la práctica de comprar un nuevo teléfono inteligente cada dos años, un hábito creado por los proveedores de telecomunicaciones, es tan perjudicial para el medio ambiente.

Veracidad News.