Que un menor se distraiga con facilidad, o se le complique concentrarse y como consecuencia saque malas notas; no sólo es cuestión de falta de disciplina, quizá el niño padezca de Trastorno por Déficit de Atención o Hiperactividad (TDAH).
En México el TDAH ha aumentado constantemente, actualmente lo padece 12 por ciento de la población, informó La Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de México (UNAM).
Se trata de un trastorno de carácter neurobiológico originado en la infancia, que conlleva una inmadurez en los sistemas que regulan el nivel de movimiento, impulsividad y atención; que en muchas ocasiones está asociado con otros trastornos comórbidos.
Los infantes que sufren TDAH tienen menos capacidad para seguir instrucciones o se mueven más de lo que se esperaría para su edad.
Generalmente esta patología afecta sobre todo a menores y los varones son más propensos a padecerla. Aunque existen casos registrados de adultos mayores de 18 años que padecieron TDAH y aún tienen persistencia de los síntomas.
Esta enfermedad a diferencia de muchas otras no se contagia y existe tratamiento para ella, la causa principal del TDAH es la herencia, poco más del 75 por ciento de los casos tienen origen genético.
No obstante, determinar el origen es complicado ya que la patología no la causa un solo gen y además estos genes interactúan entre ellos. Hay muchos implicados, principalmente los sistemas que regulan la dopamina, la adrenalina, la serotonina, entre otros.
Además, hay una serie de factores que influyen en el desarrollo del trastorno, que están relacionados con el embarazo, el parto y los primeros meses de vida, los cuales pueden producir TDAH. Estos son el consumo de tabaco y alcohol durante la gestación o la presencia de sufrimiento fetal, entre otros.
Con información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.
