Esto fue lo que Liga MX añadió al reglamento por grito

Los polémicos añadidos al Reglamento de Competencia de la Liga MX efectivamente tenían un antecedente, pero fue hasta la versión de la norma para el próximo año futbolístico en que el organismo detalló los protocolos para combatir el grito “¡eh, puto!”.

Este miércoles, la Liga MX emitió un comunicado donde mencionó que la suspensión de un juego por comportamiento discriminatorio del público era posible desde e 2014.

Sin embargo, en el reglamento de ese año solo se mencionaba en un par de líneas y no en los varios párrafos que presenta la edición actual.

El actual artículo 63 del Reglamento de Competencia es una reforma al artículo 54 que originalmente se incorporó por instrucción de FIFA y que solo contemplaba la posibilidad de suspender un partido de liga por una situación homofóbica como una causa extraordinaria.

Para el próximo torneo, la liga reformó el Reglamento de Competencia de la temporada 2017-18 y modificó el artículo 54 de la temporada 2015-16 sobre la suspensión de partidos que versaba:

Los partidos “solo podrán suspenderse por causas de fuerza mayor o estado de emergencia, falta de energía eléctrica, sobrecupo, invasión o agresión del público, incomparecencia de alguno de los contendientes, o retirada de la cancha de algún club o comportamiento impropio y discriminatorio de los asistentes al estadio”.

En el último año se ha disparado la cantidad de veces que el grito “eh, puto” se utiliza en los estadios de la liga mexicana y esto ha trascendido a los partidos de la Selección Mexicana.

La FIFA ha tenido que tomar medidas disciplinarias contra la Federación Mexicana de Futbol con multas económicas que ascienden a más de 2 millones de pesos. Incluso en la Copa Confederaciones el comité organizador decidió que las personas que lanzaran estos gritos homofóbicos serían retirados de los estadios.

La última medida fue la más efectiva pues solo bajo la amenaza de ser sacados del estadio, los aficionados cesaron en sus insultos contra el portero rival.

En cambio el artículo 63 amplía el concepto de incidentes y comportamientos racistas dividido en tres fases y la última es la medida de suspender el juego, desalojar a la afición y reanudar cuando la presidencia ejecutiva de la Liga MX lo decida.