Implantan a joven de 21 años prótesis total de mandíbula

Itzel Pérez Mendieta, de 21 años, se convirtió en la segunda persona en el mundo en recibir una prótesis total de mandíbula, luego de una cirugía realizada en el Centro Médico Nacional 20 de Noviembre del Issste en la Ciudad de México.

La intervención estuvo a cargo de un equipo de cirujanos maxilofaciales encabezados por Laura Leticia Pacheco, jefa de Enseñanza de la Coordinación de Cirugía, y Jorge Chaurand Lara, quienes están certificados por el Consejo Mexicano de Cirugía Maxilofacial y entrenados en el manejo del software CAD/CAM de diseño y fabricación por computadora de prótesis personalizadas y tridimensionales.

Tras la cirugía, en la que también participó el otorrinolaringólogo Rafael Ordóñez García, Itzel Pérez Mendieta resaltó que su objetivo es convertirse en una odontóloga reconocida y especializarse en cirugía maxilofacial para poder ayudar a quienes, al igual que ella, tengan problema de anquilosis temporomandibular, es decir, con la mandíbula pegada al cráneo.

Desde que nació, Itzel empezó a desarrollar una limitación en la apertura de la boca, al no poder comer, y tuvo problemas de crecimiento. Alarmada por la situación, Dulce Mendieta, mamá de Itzel, la llevó con un pediatra, en Huejotzingo, Puebla, donde viven, y éste le diagnosticó anquilosis, por lo que le ordenó trasladar a la menor de edad al CMN 20 de Noviembre para obtener atención especializada.

Cuando cumplió tres años, la niña fue revisada por la cirujana Laura Pacheco. “Llegó conmigo con su mandíbula fusionada al cráneo. Por la edad fue difícil la rehabilitación; tuvimos varias anquilosis, a pesar de operarla, y desarrolló roncopatía, o sea que por las noches ronca; además, tenía una deformidad facial severa”, subrayó la especialista.

Indicó que el camino fue largo. En 18 años de tratamiento integral que recibió en el ISSSTE fue sometida a 10 intervenciones; la más reciente se le realizó en octubre de 2016. En esa ocasión se le reconstruyeron los pómulos, se le hizo una cirugía de corrección facial media, rinoplastia, ortodoncia y diseño e implante de prótesis personalizada.

“Ahora ya puedo morder una manzana o un elote, soy capaz de comer una hamburguesa, que es de mis platillos favoritos. Puedo tocarme la cara y no sentir el vacío de la mandíbula. Con la prótesis acabaron años de sufrimiento por cirugías difíciles y tratamientos dolorosos; puedo sonreír y eso me hace sentir bien conmigo misma, porque no lo podía hacer cuando era chiquita”, dijo Itzel.

La joven, quien señaló que nunca sufrió por bullying ante su condición, agradeció a todo el personal médico del Issste que ayudó en sus cirugías.

“Antes de entrar a la escuela se avisó de mi problema y la verdad es que he tenido buenas amigas, eso también me ha ayudado a sentirme segura”.

La prótesis mandibular fue diseñada para responder a las necesidades de deficiencia anatómica de Itzel y todo su tratamiento ha tenido un costo de más de 5 millones de pesos, dado el precio de cirugías, estudios, terapias y atención multiprofesional de alta especialidad, informó la doctora Pacheco Ruiz.

Explicó que los cirujanos maxilofaciales del instituto, apoyados en estudios de tomografía de la paciente, diseñaron una prótesis exclusiva para la joven, que fue impresa en 3D. Además de un modelo plástico que reproduce la anatomía de la mandíbula, los componentes de la prótesis y las áreas de tejido óseo que había que remover durante la cirugía, se hizo una guía para planear y ensayar el implante exitoso de la prótesis en la paciente.

“Operamos a Itzel el 19 de octubre de 2016; fue una cirugía con alto grado de complejidad que implicó ocho horas de trabajo. No se puede acceder por la boca de la paciente porque el contacto con saliva pondría en riesgo de infección el procedimiento; los abordajes se hicieron detrás de las orejas en la base de cráneo y por el frente del cuello para llegar a la mandíbula”, expresó.

El cirujano otorrinolaringólogo Rafael Ordóñez García, certificado por los Consejos de Otorrinolaringología y de Cirugía de Base de Cráneo y de Cabeza y Cuello, expuso que además de las deficiencias en el desarrollo óseo que presentaba Itzel por la anquilosis temporomandibular con que nació ella sufrió un accidente en moto que le lesionó el tabique nasal. Ambas condiciones afectaron la vía aérea, la paciente respiraba por la boca todo el tiempo, por lo cual le operó la nariz y corrigió su estructura, y la dejó en óptimas condiciones funcional y estética.

Itzel agradeció a Pacheco Ruiz “porque me ha atendido desde niñita, puse toda mi confianza en ella y no me defraudó. Quisiera que mis papás supieran cuánto los amo y les agradezco todo lo que han recorrido tomados de mi mano”, comentó.