La oración de fe, sana al enfermo.

En los primeros días del cristianismo, cuando la Iglesia estaba empezando a construirse, Dios usó milagros para edificar la fe, y aun lo hace. Así que, podemos descansar seguros en la fe de que Dios, que es el Dios de los milagros, escucha nuestras oraciones.

REDACCIÓN VERACIDAD CHANNEL.

Cuando la medicina era aún muy primitiva, la gente depositaba toda su confianza en la fe. Con el paso de los años, los adelantos científicos, y el mundo del consumo constante, los seres humanos nos hemos alejado de nuestro orden espiritual, para perseguir las tendencias impuestas por las industrias.

En los primeros días del cristianismo, cuando la Iglesia estaba empezando a construirse, Dios usó milagros para edificar la fe, y aun lo hace.

En la Biblia encontramos muchos ejemplos de sanidad divina, en donde el poder de Dios no cambia, porque Él es el mismo ayer, hoy y por siempre Hebreos 13:8 y podemos confiar en que por medio de nuestras oraciones y fe, Él sana SANTIAGO 5:15 “La oración de fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará. Y, si ha pecado, su pecado se le perdonará.”

Algunos de los milagros que Dios hizo a los enfermos son: MARCOS 7:32-35 en donde Jesús puso sus dedos en los oídos de un hombre que era sordo y tartamudo. Suspiró y dijo: “¡Sé abierto!”, y se abrieron sus oídos y pudo hablar con claridad. MARCOS 5:34 Jesús dijo a la mujer que tocó el borde de su manto para ser sanada, “Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote.” Estos, son algunos de los muchos milagros que Jesús hizo.

A menos que nuestras oraciones estén acompañas de fe, no debemos esperar recibir nada del Señor, porque la confianza en Dios es la base de la oración. SANTIAGO 1:6-7 “Pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor.” 

Así que, podemos descansar seguros en la fe de que Dios, que es el Dios de los milagros, escucha nuestras oraciones.

Los especialistas en programación neurolingüística, siempre han afirmado con absoluta certeza, que el poder de la palabra de Dios es milagroso. El tan solo hecho de decir algo, afirmarlo y repetirlo de manera segura, hará que tal hecho suceda casi milagrosamente, siempre y cuando la palabra sea dicha con mucha fe.

Un estudio realizado por el Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh (UPMC), en Estados Unidos, muestra que el aumento de la esperanza de vida se deriva de la actividad espiritual semanal es comparable a los beneficios que genera para la salud el ejercicio físico regular o el consumo de medicamentos para reducir el colesterol. 

Esta medida pueden por igual aumentar la esperanza de vida entre tres y cinco años de media, lo que significa que las tres prácticas son igual de importantes para asegurarse una larga vida.