Millones de personas han sufrido algún tipo de violencia

La violencia hace referencia a la cualidad de ser violento, que es aquello que está fuera de su estado natural, situación o modo.

Redacción, Veracidad News

Proveniente del latín violentĭa, la violencia hace referencia a la cualidad de ser violento, que es aquello que está fuera de su estado natural, situación o modo; que se ejecuta con fuerza, ímpetu o brusquedad.

Actualmente, vivimos en un mundo donde la violencia está relacionada con cualquier persona, ya sean padres o madres, maestros, amigos, compañeros o incluso extraños.

La impunidad de quienes la ejercen y la frecuencia con que se comete puede llevar a que las victimas consideren que la violencia es normal.

Entre los más vulnerables se encuentran los niños, quienes, de acuerdo con las estadísticas, sufren actos de violencia en todas las etapas de su infancia y en diversos entornos. Esto ocurre a menudo a manos de individuos de confianza con quienes se relacionan todos los días.

A nivel mundial, uno de cada cuatro infantes menores de 5 años, es decir, 176 millones viven con una madre que es víctima de violencia de pareja. Además, cerca de 300 millones de 2 a 4 años son víctimas de algún tipo de disciplina violenta por parte de sus cuidadores, de los cuales 250 millones (alrededor de 6 de cada 10) son castigados por medios físicos.

Aproximadamente 1,100 millones de esos cuidadores dicen que el castigo es necesario para criar o educar adecuadamente a los infantes.

A pesar de que se cree que las escuelas son un lugar seguro para ellos, en los últimos 25 años se registraron 59 tiroteos en las instituciones de 14 países que, según los informes, causaron por lo menos un fallecimiento. Casi 3 de cada 4 de estos incidentes ocurrieron en Estados Unidos.

En 2016 se documentaron o verificaron cerca de 500 ataques o amenazas contra escuelas en 18 países o territorios alrededor del mundo. Por otra parte, cada 7 minutos, en algún lugar, un adolescente es asesinado en un acto violento. Sólo en 2015, costó la vida de alrededor de 82,000 adolescentes. Las personas de 15 a 19 años son particularmente vulnerables, ya que tienen tres veces más posibilidades de morir violentamente que las de 10 a 14 años.