En el capítulo 6 del libro de Proverbios, versículos del 16 al 19, se describe cuales son algunas de las cosas que al Señor no le gustan.
Redacción, Veracidad News
Actualmente es común que en las iglesias se predique acerca de las cosas que no le agradan a Dios, incluso se han realizado un sinfín de estudios bíblicos con el objetivo de esclarecer las prácticas erróneas de la vida diaria.
En el capítulo 6 del libro de Proverbios, versículos del 16 al 19, se describe cuales son algunas de las cosas que al Señor no le gustan: “Seis cosas aborrece Yahweh, y aun siete son abominaciones para su alma: los ojos altivos, la lengua mentirosa, las manos que derraman sangre inocente, el corazón que maquina perversos designios, pies que se apresuran para correr al mal, el testigo falso que habla mentiras, y el que siembra discordia entre hermanos”.
Además no está de acuerdo con las mentiras, los chismes, murmuraciones, venganza, arrogancia, etc. A pesar de esto, y conscientes de que no le agrada a Dios, existen personas que aun practican estas actividades, incluso procuran argumentar que están permitidas.
Insistir en mantenerse en dichas prácticas, hace que el individuo se convierta en una persona contumaz.
Proveniente del latín contumacia, es la tenacidad y la dureza de persistir en un error. Con esto se entiende que se trata de una persona que consiente de que está mal se empeña en realizar las prácticas que no son agradables ante los ojos de Dios.
Cabe destacar que la Escritura dice, que estas personas cuando además de hacer, enseñan a otras a realizarlo o causar herejías destructoras, serán castigadas en el día del juicio.
“Si alguien tiene un hijo obstinado y rebelde, que no escucha la voz de su padre ni la voz de su madre, y aun cuando le disciplinen, no los escucha, entonces lo tomarán su padre y su madre y lo llevarán ante los ancianos de su ciudad y a la puerta de su lugar”. Deuteronomio 21:18-19.
