La campañas que la sociedad civil organizada y gobierno emprendieron desde hace años para dejar el uso de los popotes de plástico para beneficio del medio ambiente comienzan a dar los primeros resultados.
La Semarnat lanzó este año una campaña “Sin popote está bien”, para concientizar que la contaminación que generan al tardar hasta cien años en biodegradarse.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales busca desincentivar el uso de plástico que ha generado la muerte un millón de aves y cerca de 100 mil mamíferos marinos de 600 especies en todo el mundo, según datos de la ONU.
Desde 2016 campañas como #AntiPopotes, movimiento generado por la organización La Mala Vida en redes sociales, buscó que bares y restaurantes dejaran de usar el popote en sus sucursales.
Los primero resultados en el país fue que la Cooperativa Pascual informó que dejará de usar popotes de plástico como parte de su campaña ‘México Lindo y Querido’, que también buscará la reforestación de bosques, reciclaje y limpieza de playas.
La cooperativa informó que el uso de popotes se reducirá transformando los envases de la bebida, sobre todo en los de tamaño mediano y grande.
Además, la red de cafeterías Starbucks anunció esta semana que en 2020 dejará de usar pajitas de plástico en sus más de 28 mil tiendas en todo el mundo con el objetivo de reducir su impacto medioambiental.
Para sustituir los más de mil millones de popote y pajitas que usan anualmente, la empresa de Seattle ofrecerá una tapa reciclable diseñada por el ingeniero de la compañía Emily Alexander.
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