¿Por qué tenemos pesadillas?, esto sabemos según la ciencia

No hay lugar tan aterrador como el lado oscuro de la mente humana, ese lugar donde se generan pesadillas. Desde los albores de la humanidad, neurólogos, psicólogos, chamanes y soñadores, han intentado explicar la causa que provoca estos aterradores delirios nocturnos. Aunque el significado de nuestras pesadillas puede permanecer sumido en el misterio de las sombras, al menos estamos empezando a comprender por qué nuestros demonios ocultos a veces nos visitan mientras dormimos.

James Pagel, profesor asociado de la Escuela de Medicina de la Universidad de Colorado, señala que existen diferentes tipos de sueños temibles, los cuales no todos son clasificados como pesadillas. Los terrores nocturnos, por ejemplo, tienden a atacar a la mitad del ciclo de sueño, durante la fase de sueño profundo y no tienen forma clara o trama, sino simplemente hacen que las personas se despierten exaltadas con una sensación intensa e inexplicable de miedo.

Por otra parte, las pesadillas se experimentan durante la fase de movimiento rápido ocular (REM) que se produce al final del ciclo del sueño. Las pesadillas son simplemente “sueños con una historia aterradora”, son muy comunes y casi todo el mundo las ha experimentado en algún momento de sus vidas, especialmente durante la infancia y la adolescencia.

En la mayoría de los casos esto no es un problema grave, es de esperar tener una pesadilla de vez en cuando, sobre todo si hemos experimentado algo un poco inquietante durante el día, como ver una película de terror. Sin embargo, si una persona experimenta pesadillas frecuentes, las cuales impiden dormir y comienzan a provocar sentimientos de angustia durante las horas de vigilia, es momento de considerar una visita a un especialista.

Aunque los mecanismos neuronales no están completamente entendidos, se sabe que las personas con trastorno por pesadillas, presentan anormalidades en la actividad de una región del cerebro llamada la amígdala, encargada de controlar el miedo y el aprendizaje. También se ha evidenciado que estas personas tienden a tener una alta actividad en el sistema paralímbico.

Entre las principales causas de las pesadillas se encuentra el síndrome de estrés post traumático, ciertos medicamentos que alteran las hormonas y los neurotransmisores que regulan el sueño. Las personas con trastornos psicológicos tienden a ser especialmente propensos a tener pesadillas.