Las personas día a día tienen diferentes ocupaciones, trabajo, escuela, familia, hobbies, etc.
Pero ¿Qué importancia le estamos dando a cada uno?. En ocasiones les damos importancia a una sola cosa, por ejemplo el trabajo y debemos recordar que hay tiempo para todo, y que no hay que descuidar las cosas más importantes como lo son la familia, la vida espiritual, etc.
Dice la palabra de Dios que todo tiene su tiempo y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
“Tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar; tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar; tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar”. Ec. 3:3-5
Así que no te preocupes por no poder realizar todas las cosas que quieres, el día tiene 24 Hrs y si Dios te permite otro día tendrás más tiempo.
¡Bendiciones!
