Una de las problemáticas más conocidas a nivel mundial es la crisis humanitaria que está cursando Venezuela, debido a la falta de alimentos, trabajo, servicios de salud entre otras cuestiones de primera necesidad orillan a sus habitantes a huir del país.
Hasta la fecha miles de personas provenientes del país mesoamericano han logrado recibir asilo en otras partes del mundo, principalmente Perú, Colombia y México. Pero no todos tienen oportunidad de viajar, por ende, los venezolanos día a día luchan contra el hambre, la inseguridad y los escases de empleo.
Motivado por ayudar a nuestros hermanos en Venezuela el pastor Larry Teran, durante los últimos años ha llevado a cabo distintas iniciativas que buscan mitigar el problema de la desnutrición infantil a través de emprendimientos sociales sin fines de lucro, como Una Pulsera Por Venezuela.
“Nació debido a la necesidad que está pasando nuestro país, niños jóvenes y adultos están siendo impactados negativamente porque hay mucha deserción escolar, hay enfermedades producto de que los menores no se están alimentando bien”, explicó Teran.
De acuerdo con el ministro, manos solidarias se unieron a la causa para recaudar fondos, así surgió “Una Pulsera por Venezuela”, la labor inicialmente financió desayunos para 50 niños principalmente de primaria, aunque hoy en día también nutren a jóvenes de media general.
Quienes forman parte del programa mencionaron que Invertir en la vida y alimentación de un pequeño, es creer en el futuro de la nación venezolana. Los resultados a este tipo de programas se esperan a largo plazo y el impacto social pueda ser cada más medible.
Actualmente Una Pulsera por Venezuela se encuentra recolectando fondos para continuar asistiendo unidades educativas y poder ampliar el campo de trabajo a más colegios en condiciones similares.
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