¡Cuidado! ¿Estás seguro de que tu grano no es cancerígeno?

Generalmente las espinillas desaparecen en un par de días -dependiendo de qué tan grave sean-. Pero para esta joven resultó ser una experiencia de vida o muerte, debido que resultó ser cáncer.

Marisha Dotson es una mujer de 28 años que al igual que a todas le apareció un acné en la punta de su nariz. Pero el tiempo pasaba y este no se curaba, simplemente se hacia más grande.

Al ver esto acudió al dermatólogo, el cual le dio la aterradora noticia que tenía carcinoma de células escamosas. Este tipo de cáncer es mortal y los doctores le dieron solo el 20% de probabilidades de sobrevivir a la enfermedad. El cáncer ya se había extendido a su nariz y mandíbula, el cual había empezado como una inofensiva espinilla en la nariz.

Tras ello se tuvo que someter a una cirugía la cual constaba de diferentes etapas para eliminar las capas del tejido canceroso, la cual se encontraba principalmente en su nariz.

Durante la operación, la cual duró 15 horas, se logró extirpar el carcinoma de células escamosa. Sin embargo, los doctores notaron que el tumor se había diseminado en el tejido.

“Mi tumor era como una medusa con tentáculos cancerosos que me llegaban hasta la cara. Después de un par de horas en la cirugía mi realidad cambió, el tumor fue mucho más profundo de lo que pensaban los cirujanos, y fue muy doloroso. A pesar de tener 300 inyecciones de anestésico en mi cara, todavía me dolía cuando seguían cortando y quemando cada capa, tan cerca de mis nervios”, explicó Dotson.

Debido a ello, los doctores no tuvieron otra solución que remover el cartílago y mucho tejido, ocasionando que la joven se quedara sin dos tercios de su nariz. Luego realizaron una cirugía de reconstrucción con la piel de su frente.

“Podía sentir que había una parte de mi rostro perdido, pero cuando me miraba en el espejo estaba devastada, tenía un agujero enorme donde solía ver mi nariz. Los cirujanos sacaron la piel de la coronilla de mi cabeza, afeitaron una porción de la cabeza donde hay cabello y tomaron la piel, y me sacaron el cartílago de la oreja“, afirmó.

OTRA VEZ AL QUIRÓFANO

Poco tiempo después de las dolorosas operaciones otro cáncer se empezó a desarrollar en su rostro.“Cada lugar era canceroso, yo estaba tan enojada porque había pasado por mucho tan solo con la reconstrucción”, afirmó.

“Tenía otra espinilla grande en mi mejilla, debajo de mi ojo derecho, dos grandes en la parte superior del puente de mi nariz, uno sobre el lado izquierdo de mi nariz y luego ocho más pequeños debajo de mi nariz. El de mi mejilla parecía escamoso, pero como una ampolla también, los otros eran más como pequeñas espinillas o manchas. Volví a someterme en cirugía para quitarlos y salí como un ‘monstruo de Frankenstein’, ya que la nariz y el labio necesitaba injertos de piel”, relató Dotson.

Tras las traumáticas operaciones y cambios de su rostro, Dotson nunca se rindió. “Las probabilidades de que sobreviviera a esta forma de cáncer eran muy bajas, al igual que las tasas de éxito de la cirugía, me dieron menos de un 20 por ciento de posibilidades de estar aquí todavía hoy”.

“Pero ahora he tenido dos pruebas para ver si el cáncer ha vuelto y ambos están claros, lo que me ha dado esperanza, así que soy muy optimista sobre el futuro”, agregó.

En sus múltiples cirugías los doctores le tuvieron que extraer los huesos de la mandíbula, la cavidad del seno nasal, el tejido debajo de un ojo y perdió ocho dientes. Todo esto debido a la propagación de la enfermedad en su cara.

Ahora Ditson es una sobreviviente y asegura que no le importa su apariencia, solo se siente “afortunada de estar viva”.

“Gané estas cicatrices y debería estar orgulloso de ellas, ya que son un testamento de mi voluntad de vivir, la sangre, el sudor y las lágrimas que derramé para sobrevivir”, comentó.

Actualmente la joven usa un implante dental. El cual le permite realizar actividades básicas como hablar o comer, ya que perdió todos los huesos de su rostro.

“El daño que tengo ahora voy a vivir con el resto de mi vida, he renunciado a la parte cosmética de las cosas y sólo se siente tan afortunada de estar viva. Aunque haya tenido pasar por el dolor”, expresa.

“Al principio, tomé la decisión de que cualquier dolor que tuviera que pasar para vivir un poco más de tiempo lo haría y también tengo un hermano que me ha brindado su apoyo y hemos estado muy cercanos durante este duro proceso”, añadió.