Echa sobre Jehová tu carga.

El deseo de Dios no es que nosotros carguemos con todos nuestros problemas, sino que nos fortalezcamos en Él, para permitirle que tome el control de nuestra vida.

REDACCIÓN VERACIDAD CHANNEL.

SALMOS 55:22 “Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo.”

La Biblia menciona como “una carga” a circunstancias que pueden afligirnos, las cuales pueden ser emocionales, mentales o espirituales.

Este versículo nos habla de dos cosas muy importantes; la primera es que, la vida de un cristiano no está exenta de cargas, por ello, es posible que Dios las ponga en nuestras vidas. Sin embargo, el problema no es su origen, sino la manera en cómo las manejamos. Y aunque Él mismo es quien nos las pone, de igual manera les coloca límites, es decir, no permite que las llevemos más allá de nuestras capacidades y fuerzas.

La segunda cosa de la que nos habla este versículo es que, la mejor manera de afrontar cada una de estas cargas, ya sea grande o pequeña, es llevándola al Señor.

MATEO 11:28-30 “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.”

El deseo de Dios no es que nosotros carguemos con todos nuestros problemas, sino que nos fortalezcamos en Él, para permitirle que tome el control de nuestra vida.

SALMOS 55:22 “…No dejará para siempre caído al justo.”

Esta afirmación es una declaración de fe que expresa la plena confianza que David tenía en el Señor. Y como cristianos tenemos que buscar cada día que nuestra fe se fortalezca a tal punto que nuestra confianza este en Dios. Para ello, debemos ser fuertes y no tenemos que dudar en ningún momento que Él obrará a favor de nuestras vidas.

Cabe mencionar que, la oración es el medio por el cual, nosotros entregamos esas cargas al Señor. 1 PEDRO 5:7 “echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.”

Muchas veces, aun cuando sabemos que podemos descansar en Jehová, nuestra mente se rehúsa a creer que esto puede ser la solución, ya que se trata de la batalla entre nuestra mente y nuestra fe. Sin embargo, esta, debe estar bien cimentada, aun en medio de las pruebas.  COLOSENSES 2:7 “arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe”.