El ministerio terrenal de Jesús

El Ministerio terrenal del hijo de Dios tuvo un inicio muy humilde, su bautismo fue en un río fangoso en un lugar apartado, pero este pequeño comienzo tiene un gran significado para los hijos de Dios.

REDACCIÓN VERACIDAD CHANNEL.

JUAN 3:16 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”

El Ministerio terrenal del hijo de Dios tuvo un inicio muy humilde, su bautismo fue en un río fangoso en un lugar apartado, pero este pequeño comienzo tiene un gran significado para los hijos de Dios.

  • VIVIÓ UNA VIDA PERFECTA.

Desde Su juventud, Jesús obedeció todo lo que Su Padre Celestial le pidió, porque Él amaba y obedecía la verdad. LUCAS 2:40 “Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él.”

Jesús hizo la voluntad de Su Padre Celestial y declaró: JUAN 8:28-29 “…Nada hago por mí mismo, sino que, como el Padre me enseñó, así hablo. …Yo hago siempre lo que le agrada”

–       NOS ENSEÑÓ A AMAR Y A SERVIR A NUESTROS SEMEJANTES.

Él vino a la tierra no sólo para morir por nosotros, sino también para enseñarnos la forma en que debemos vivir. Nos enseñó que hay dos grandes mandamientos; el primero: amar a Dios con todo nuestro corazón, mente y fuerza; y el segundo: amar a los demás como a nosotros mismos. MATEO 22:37-39.

  • JESÚS PASÓ SU VIDA AL SERVICIO DE LOS DEMÁS.

Curó enfermedades, hizo que el ciego recobrara la vista, que el sordo oyera y que el cojo caminara.

La biblia muestra que una vez, estaba sanando enfermos y se hizo tarde y la gente tuvo hambre. En lugar de mandarles que se retiraran, bendijo cinco hogazas de pan y dos peces y en forma milagrosa dio de comer a una multitud de cinco mil personas. MATEO 14:14-21

–       ORGANIZÓ LA ÚNICA IGLESIA VERDADERA

Jesús quería que Su evangelio se enseñara a todos los habitantes de la tierra, por lo que eligió a doce apóstoles para que testificaran de Él. Ellos fueron los primeros líderes de Su Iglesia, los cuales recibieron la autoridad para actuar en Su nombre y para llevar a cabo las obras que le habían visto hacer a Él. 

–       NOS REDIMIÓ DE NUESTROS PECADOS Y NOS SALVÓ DE LA MUERTE

Hacia el final de Su ministerio terrenal, Jesús se preparó para hacer el sacrificio supremo por todos los pecados de la humanidad; había sido condenado a morir porque Él había testificado a la gente que era el Hijo de Dios.

Sufrió “según la carne”, tomando sobre Sí nuestros dolores, enfermedades y pecados.