Se nos dice que los seres humanos son una parte importante de la creación de Yahweh. ¡que fueron creados a su imagen! La palabra hebrea traducida por imagen es “tzelem” que es derivada de “tzel” que significa “sombra”, de ahí la relación entre luz y sombra, el hombre es llamado a reflejar la perfección de Yahweh, (tamim en hebreo) esto es la llenura, plenitud y balance de vivir en su presencia. Pero también encontramos la palabra temunah la cual significa: semejanza, encarnación, manifestación y figura. Ésta al mismo tiempo está ligada a otra palabra hebrea, emunah la cual nos habla verdad, fe, firmeza y fidelidad.
Como podemos ver, desde el principio Yahweh dejó plasmado en el interior del hombre la forma de manifestar su Nombre, pues dijo que pondría eternidad en el corazón de ellos. (Eclesiastés 3:11). Vemos la palabra griega tselem que significa imagen, parecido y figura representativa, enlazándose a temunah la cual nos habla de encarnación, misma que aparece en Juan 1 donde se nos habla de Yeshua como el verbo encarnado.
Otra manera en que podemos ver esta relación es con el nombre “Bezaleel” que literalmente significa “a la sombra de Dios”, recordemos que fue llamado a la construcción del Tabernáculo y sus utensilios. (Éxodo 31). El Tabernáculo y todo lo que había dentro, permitió a los antiguos israelitas acercarse a Yahweh en un servicio establecido por Él. De tal manera que cuando un hombre rinde culto al Creador de los cielos y la tierra, es como si la persona entrara en la sombra de Yahweh, convirtiéndose en parte de ella y así reflejar la plenitud divina.
