La sangre, ¿vida o muerte?

Porque la vida de la carne está en la sangre, y Yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas, porque es la sangre, en razón de la vida, la que hace expiación. (Levítico 17:11).

LA SANGRE Y LA LEY DE YAHWEH

Cuando se aborda el tema de la sangre en la palabra de Yahweh, se hace alusión a la vida tanto en el hombre como en la bestia, por lo que la pérdida de ésta se equipara con la muerte según está escrito en Génesis 9:4, donde se nos dice que la vida de la carne está en la sangre, del mismo modo como aparece en Levítico 17:11-14 y Deuteronomio 12:23. La sangre es considerada sagrada, y no sería usada de forma profana. No se comería pues sería motivo de muerte como está escrito en Levítico 3:17, 7:26, 17:10-14. La ordenanza de Yahweh no era exclusiva para los israelitas, también para los extranjeros que habitaren en medio de ellos. (Levítico 17:8-15).

En el sistema sacrificial de animales, la sangre se ofrecía a Yahweh derramándose sobre el altar y su alrededor. (Éxodo 29:16, Levítico 3:2). El poder de la sangre estaba en su expiación por el pecado del pueblo; siendo derramada sangre inocente para cubrir la culpa del transgresor.

Este principio apuntaba al sacrificio perfecto de Yeshua el Mesías de Israel, quien con el derramamiento de su sangre expiaría el pecado de la humanidad. Su sangre trajo la reconciliación y santificación; estableciendo la paz con Yahweh, siendo éste el único fundamento para reconciliar al hombre con Yahweh (Hebreos 10:18-19, 1° Corintios 10:16, Apocalipsis 7:14). La sangre de Yeshua trae la justificación de todos los que son llamados por Yahweh a retornar a Él recuperando así su legado, esto es la Tora -Instrucción divina- (Romanos 3:25-26).