Más allá del espectáculo – Veracidad News

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Un impresionante show, acompañado de una agradable atmósfera y asombrosos personajes; es lo que ofrece hace más de 18 años el circo “Daniel Atayde”, pero para hacer realidad este atractivo, del otro lado del espectáculo hay aproximadamente 50 personas laborando;  la mayoría de ellas nacieron y crecieron allí, formando una gran pero peculiar familia.

Tal es caso de Holly Valenzuela, quien actualmente tiene 42 años, para ella toda su vida se resume en dos palabras “el circo”, la amante de las acrobacias aseguró que llegó al mundo en un remolque, desde entonces sigue la línea del entretenimiento circense.

Resaltó que toda su familia se ha dedicado a la misma labor desde hace seis décadas, actualmente tiene tres hijos, a quienes, por cierto; dio a luz en el circo, ellos también crecieron dentro de la inmensa carpa, hoy en día trabajan allí.

¿Cuál es la experiencia más difícil que has tenido en estos 42 años viviendo en el circo?

“ Fue accidente, en el  que murieron los cuatro familiares, por parte mi esposo, estaban trabajando con nosotros e iban al ADO y al salir de un pueblo tuvieron un accidente, murieron los cuatro; chocaron con una camioneta de valores; eso siento que ha sido lo más triste que hemos pasado”, Confesó Holly.

Asimismo, la cirquera, mencionó que en aquel terrible accidente la carpa del circo fue donde velaron a los cuatro cuerpos, también señaló que le gustaría morir cuando sea una adulta mayor en el lugar que ha sido su hogar desde que nació.

Por otro lado, Ericsson Ramos, sobrino de Holly, a sus 17 años se ha convertido en unos de los atractivos más populares del show, él se gana la vida realizando impresionantes acrobacias, utilizando su cuerpo como herramienta principal.

¿Cómo le hacías para ir a la escuela?

“La CONAFE mandan a un maestro a cada circo, a partir de 12 niños para que les de estudios”, señaló Ericcson.

El adolescente comentó que al igual que sus primos sólo concluyó la primaria, y por ahora no le interesa seguir estudiando. Asimismo, dijo que desarrollarse dentro del circo es igual que crecer en cualquier otro lugar, ensaya su acto, descansa, ayuda con tareas domésticas, posteriormente convive con sus amigos y familia, entre otras actividades.

En ese mismo sentido, Evelin Ramos de 19 años , quien es una de las hijas de Holly, dijo que uno de sus  primeros acercamiento al espectáculo fue antes de cumplir seis años;  su padre la motivó a practicar algunos ejercicios, los cuales la llevaron a convertirse en una increíble contorsionista.

¿Te imaginas viviendo en otro lugar o con otro modo de vida?

“No, me he quedado una semana con otra familia y no me hayo”, señaló la joven.

Cabe mencionar que el hermano menor de Evelyn, Brayan Ramos, de 15 años también participa en el acto del entretenimiento, su colaboración consiste en mantener el equilibrio en una cuerda a más de tres metros de altura; además, contribuye en la cama elástica junto con José Suárez de 25 años, ambos realizan acrobacias, señalaron que una de sus partes favoritas del circo es viajar distintas partes del país e incluso del mundo, al igual que conocer a mucha gente.

Por la cuestión que prohibió traer animales a los circos, ¿cómo fue que tomaron ese suceso?

“Nunca esperamos que fueran a quitar los animales, porque los animales es lo principal es la vida del circo. Si la gente venía un 100 por ciento al circo por los animales, puede venir ahorita un 30 por ciento por el circo”, respondió Brayan Ramos.

Los chicos resaltaron con el transcurso del tiempo se adaptaron a la situación de los circos sin animales, aunque de acuerdo con ellos los tenían en muy buenas condiciones; ya que los criaron desde pequeños, fue difícil separarse de ellos por el aspecto sentimental, debido a que formaban parte de los que algunos consideran inusual, pero muy unida y amorosa familia.

Con imágenes de Raymundo Labastida e información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.