Alabar es un acto de amor, fe y gratitud hacía Dios, por todo lo que Él ha hecho por nosotros, de esta forma agradecemos todos aquellos pequeños grandes milagros con lo que cobija nuestra vida.
La palabra hebrea Yadah significa alabanza, hace referencia a alabar y ser agradecidos. Al respecto, una segunda palabra que menudo se traduce como “alabanza” en el Antiguo Testamento es zamar, “cantar alabanza”.
David fue el autor del libro de Salmos, compuesto por 150 capítulos, algunos de ellos escritos en forma de canticos; tratando temas como la grandeza de y Su creación, guerra, adoración, sabiduría, pecado y maldad, juicio, justicia y la venida del Mesías.
Entre los salmos que hablan de adoración se encuentra el Salmo 9:2: “Me alegraré y me regocijaré en ti;Cantaré a tu nombre, oh Altísimo”. Salmo 18:3: “Invocaré a Jehová, quien es digno de ser alabado,Y seré salvo de mis enemigos”.Salmo 21:13 : “Engrandécete, oh Jehová, en tu poder;Cantaremos y alabaremos tu poderío”.
La alabanza se origina en un corazón lleno de amor hacia Dios (Deuteronomio 6:5). El amor, nacido de una relación con Dios a través de Jesucristo, es una parte esencial de la alabanza.
Si alabar a Dios es algo nuevo para ti, trata de alabarle por lo que Él te inspire. ¡Proclama que la bondad de Dios es sin medida; es abundante e inmensurable! A continuación, algunas maneras para comenzar:
• Alaba a Dios por Su santidad, misericordia y justicia (2 Crónicas 20:21, Salmos 99:3-4)
• Alaba a Dios por Su gracia ( Efesios 1:6)
• Alaba a Dios por Su cuidado (Salmos 117)
• Alaba a Dios por Su salvación (Efesios 2:8-9)
Sólo el Señor se merece nuestra alabanza y adoración. Él es digno “de recibir la gloria y la honra y el poder” (Apocalipsis 4:11). Él es Dios sobre todos los dioses, es Rey sobre todos los reyes, es Señor sobre todos los señores. No hay nadie como Él en el cielo o en la tierra. Él es digno de toda nuestra alabanza. Por ello todo lo que hagamos debe ser para Su gloria y honra.
Con información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.
