Alimentación saludable desde tiempos bíblicos

De acuerdo con un estudio de Nielsen, México es el país el Latinoamérica con mayor índice de personas que se alimentan con base a productos naturales, por otro lado, Ana Ortega, representante en México y administradora de la campaña de The Humane League, aseguró que el 1 por ciento de la población mexicana es vegetariana, de ellos el 60 por ciento son mujeres y el 40 por ciento, hombres.

Aunque estos datos son impresionantes, la alimentación basada en frutas o verduras no es una cuestión contemporánea; existen antecedentes que datan miles de años, entre las páginas de la Biblia data la historia del profeta Daniel, quien era miembro de la tribu de Judá.

En el capítulo 10 de Daniel, se describe como él y tres de sus amigos deciden alimentarse solo con vegetales y beber exclusivamente agua.

Daniel 10:2-3: “En aquellos días yo, Daniel, había hecho duelo durante tres semanas completas. No comí pan suculento, ni entró en mi boca carne, ni vino, ni usé ungüento alguno, hasta que se cumplieron las tres semanas”.

Estas tres semanas se refieren a la observancia de la Pascua y la Fiesta de los Panes sin Levadura, las cuales tienen lugar durante el primer mes del año.

Aunque el Ayuno de Daniel limpia el cuerpo al omitir ciertos alimentos por un tiempo limitado, la intención real y más profunda es la conexión espiritual. El propósito del ayuno cristiano es buscar una relación más íntima con Dios, al tiempo que libera al cuerpo físico de alimentos y bebidas no naturales y auto-gratificantes. Su enfoque debe estar en Yahweh, no en las cosas carnales del mundo.

Durante el Ayuno de Daniel usted querrá concentrarse en la oración, el estudio de la Biblia, y en la reflexión. El Ayuno de Daniel es una excelente manera de comenzar la preparación para crecer en el Señor.

Los lineamientos básicos del Ayuno Daniel incluyen comer: frutas, nueces y vegetales.

Con información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.