La institución matrimonial se encuentra en uno de sus peores momentos. Por eso, aunque asistimos a las bodas con los mejores deseos para los novios, a veces no podemos menos que preguntarnos: “¿Será un matrimonio feliz y para toda la vida?”. Eso dependerá de cuánto confíen los casados en los consejos divinos y de cuánto empeño pongan en aplicarlos.
Proverbios 3:5-6: “Confía en Yahweh con todo tu corazón y no te apoyas en tu propio entendimiento; reconócele en todos tus caminos, y Él enderezará tus sendas”.
Dicho esfuerzo será esencial para que tengan éxito y logren mantenerse en el amor de Dios.
Algunos opinan que el matrimonio es imprescindible para ser feliz y que nadie se sentirá realizado a menos que encuentre su media naranja. ¡Nada más lejos de la realidad! Tan solo pensemos en Yeshúa. No solo no se casó nunca, sino que indicó que estar soltero es un don y animó a todo el que fuera capaz de hacerlo a permanecer en ese estado
Mateo 19:11- 12: “Entonces Él les dijo: No todos son capaces de aceptar esta palabra, sino aquellos a quienes es dado. Pues hay eunucos por los hombres, y hay eunucos que a si mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los cielos. El que sea capaz de aceptar esto, que lo acepte”.
Ahora bien, ¿existen razones válidas para casarse? Claro que sí. El matrimonio es otro don de Dios que también ofrece sus ventajas y puede hacer a las personas muy felices.
Génesis 2:18: “Después dijo Yahweh Dios no es bueno que el hombre esté solo; haré ayuda idónea para él”.
Casarse es el marco ideal para criar a los hijos, ya que estos necesitan vivir en un ambiente estable donde ambos padres les den amor, orientación y disciplina.
ECLESIASTÉS 4:12: “ Y si alguno prevalece contra uno, dos le resistirán; y un cordel de tres hilos no se rompe pronto”.
Pero ¿Cómo puede convertirse el matrimonio en una cuerda de tres hilos?
Examinemos dentro de su contexto el versículo que encabeza este capítulo: “Mejores son dos que uno, porque tienen buen galardón por su duro trabajo. Pues si uno de ellos cae, el otro puede levantar a su socio.
Cabe destacar este versículo también hace referencia a la palabra ehad, que significa diferentes personas fusionadas en una misma, bajo la dirección del Señor, esto también es mencionado en la Biblia como el cuerpo de Yeshúa.
Con información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.
