La mayoría interpreta la obediencia como acatar una orden, pero en realidad esto va más allá. ¿Usted sabe que es obedecer al Mesías?, de acuerdo con las Escrituras, un siervo que aquel que sigue al Señor de corazón, llevando a cabo al pie de la letra sus mandamientos, siendo siervo de la justicia.
En otras palabras, lo que importa es qué tan fieles le somos a Él; porque es nuestra obediencia determina nuestro amor hacía Yahweh.
Romanos 6:15-18: “¿Qué, pues? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? ¡De ninguna manera!. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia?. Pero gracias a Dios, que aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de enseñanza a la cual fuisteis entregados; y libertados del pecado, fuisteis hechos esclavos de la justicia.”
Es primordial acercarnos a Yahweh, para que Él se acerque a nosotros. No podemos servirle a distancia, sin conocerle. Como dice en Filemón 1:21-22: “Te he escrito confiado en tu obediencia, sabiendo que harás aún más de lo que te digo. Y al mismo tiempo prepárame también alojamiento; porque espero que por vuestras oraciones os seré concedido”.
La obediencia a Dios es mejor que el sacrificio, ya que a pesar de las diversas circunstancias que pueden asechar nuestro pasó por la tierra, no importa cuál sea; si confiamos, obedecemos a Dios, Él siempre estará ahí para guiarnos, darnos fortaleza y así seguir adelante.
Con información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.
