Atticus Shaffer, de 19 años, nació con osteogénesis imperfecta, un trastorno genético que se caracteriza por la fácil fractura de los huesos. El actor ha defendido su fe públicamente en varias ocasiones en las que ha reconocido que su éxito se ha dado porque está “bendecido por Dios”.
Sin duda, el actor ha demostrado ser un creyente que comparte abiertamente su fe y ha contado su historia. Asegura que se comprometió con el cristianismo a los 15 años, ya que necesitaba “conocer a Dios” y saber en qué punto del camino se encontraba. “Tengo que elegir un lado”, reconoció en PureFlix.com “Pure Talk”.
El actor señaló que fue su “lucha con el desorden genético” la que le ayudó a ser más “empático y compasivo”, ya que tuvo que “soportar y superar un dolor extremo”. “He tenido muchas fracturas en mi vida: placas, tornillos, varillas en mis piernas… Tengo la espalda en forma de S por la enfermedad”, dijo Shaffer. Admite que su enfermedad le colocó en situaciones en las que tenía que “depender de Dios“.
“Absolutamente nada es imposible cuando tienes a Dios a tu lado. y está a tu lado todo el tiempo”
En el 2008 apareció en un capítulo de la serie ‘Me llamo Earl’, y en ese mismo año también participó en la película Hancock al lado de Will Smith.
El actor ha animado a los cristianos a recordar que pueden tener un gran impacto en las industrias seculares. “Creo que podemos hacer algunos de los mejores trabajos en el mundo secular como cristianos”, afirmó, según Pure Flix Insider., alentando así a las personas a ser respetuosas y dar buenos ejemplos para los no creyentes. “Hemos sido llamados a ser luces en el mundo”, subrayó.
