Aunque el orgullosamente tabasqueño nunca imaginó visitar este tesoro turístico, la falta de oportunidades lo obligó a emprender el vuelo. Fue así como Reyes Senteno May; adoptó desde hace 15 años a Cancún como su segundo hogar.
Mencionó que cuando llegó a esta joya del caribe su primer empleo fue de mesero, con el paso del tiempo el lugar donde laboraba cerró, posteriormente buscó otro trabajo, pero debido a su edad no fue fácil conseguirlo.
A pesar del oscuro entorno, Reyes no se rindió, gracias a la asesoría de un tío fue como comenzó a realizar artesanías de hoja de palmera, labor que se ha convirtió en su fuente de ingreso desde hace más de una década.
Actualmente, el artesano oferta su mercancía deambulando por toda la ciudad, arrancando su trayectoria desde el Mercado 28 hasta el Boulevard Kukulkán,e incluso visita otros municipios como Puerto Morelos y Mahahual. Asimismo, dijo que en un día puede caminas hasta ocho horas continuas.
Sus principales compradores son nacionales, ya que, a los extranjeros, especialmente americanos les parece algo extraña su labor, aunque les llama la atención. En una jornada, que consta de 24 horas puede ganar desde 200 hasta 500 pesos, en ocasiones un poco más, dependiendo de la temporada.
Con respecto al tiempo que invierte al realizar cada manualidad varia, dependiendo del tamaño y la forma.
Por otro lado, comentó que caminar por las calles a cualquier hora puede ser peligroso, y no precisamente por los asaltantes, Reyes aseguró que ha sido victima de las autoridades, además de dueños de distintos restaurantes.
Este peculiar ciudadano aconsejó no perder la fe, siempre ver más allá de sus posibilidades ya que con mucho esfuerzo y dedicación pueden lograr cosas que no imaginan, agregó que no hay excusas para quien verdaderamente quiere ganarse el pan honestamente.
Con imágenes de Raymundo Labastida e información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.
