Veracidad News – Consecuencias de consumir bebidas azucaradas

Redacción, Veracidad News

Las bebidas azucaradas, son aquellas a las que se le añade edulcorante; las más comunes son los refrescos, tés endulzados, bebidas de frutas, con café, energéticas y leche endulzada.

De acuerdo con especialistas, el 70% del consumo de azúcar adicionado en nuestro país proviene de las bebidas. Lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud es que del total de calorías que consume una persona al día no más del 10% debe provenir de azúcares extras.

Como consecuencia, el cuerpo puede verse afectado a mediano y largo plazo; entre los padecimientos más comunes se encuentran los siguientes:

  • Diabetes tipo 2. Esta enfermedad es provocada por las altas concentraciones de glucosa en la sangre. Algunas complicaciones son el pie diabético, insuficiencia renal, retinopatía y ceguera.
  • Las gaseosas contienen ácido fosfórico; una dieta con altos niveles de fosfato se ha relacionado con el rompimiento de huesos y una probabilidad más alta de desarrollar osteoporosis. Cuando el fosfato es excretado a través de la orina, lleva consigo calcio, eliminando así este mineral esencial.
  • Triglicéridos altos. Éstos, son el tipo de grasa más común en el cuerpo. Las personas que tienden a desarrollar altos niveles de triglicéridos son aquellas cuya ingesta de azúcar y carbohidratos refinados es alta, padecen problemas cardiacos, sobrepeso o diabetes.
  • Complicaciones reproductivas. Las latas de refrescos tienen una cubierta de resina que contiene Bisfenil-A, el mismo químico utilizado en biberones para bebé, botellas de agua y contenedores de plástico, los cuales dañan el sistema endocrinológico, potencialmente causan pubertad prematura, anormalidades reproductivas e incluso cáncer. De acuerdo con datos de la Procuraduría Federal del Consumidor, en México, se ingieren en promedio más de 450 latas de refresco por persona en un año.
  • La relación entre este mal y las gaseosas es tan estrecha que los médicos calculan que por cada refresco consumido, la probabilidad de desarrollar obesidad incrementa 1.6 veces.
  • Exceso de azúcar. 20 minutos después de beber una gaseosa, el nivel de azúcar en la sangre incrementa rápidamente causando una explosión de insulina y el hígado responde convirtiendo el azúcar en grasa. 40 minutos después, la absorción de cafeína termina. Las pupilas se dilatan, la presión sube, y cómo respuesta, el hígado lanza más azúcar a la sangre. 45 minutos después, el cuerpo incrementa la producción de dopamina, estimulando los centros de placer en el cerebro, misma manera en la que trabaja la heroína.