Aunque siempre supo que algún día querría convertirse en madre, nunca imaginó que esa etapa tan anhelada en su vida llegaría en la cárcel; ella es Janeth Ledesma, quien el 15 enero de 2017 tuvo la fortuna de traer al mundo a la pequeña Valentina, quien ahora es el motor de su día a día.
Actualmente el Centro de Reinserción Social (Cereso), en Benito Juárez cuenta con mil 545 internos, de los cuales 64 son mujeres, hoy en día dos de ellas se encuentran embarazadas, mientras una hace un mes, dio a luz y otra el años pasado, aseguró Jorge Adrián López Valenzuela, director del Cereso.
“La verdad fue una noticia muy fuerte, ya que siempre me había cuidado, opte por ponerme un implante, pero ya estaba embarazada, no me había dado cuenta. Jamás me imaginé que sería madre en la cárcel; si alguien me lo hubiera dicho, me hubiera reído, la verdad”, aseguró la interna con lágrimas en los ojos.
De acuerdo con las reglas del Cereso a las madres se les permite vivir con sus bebés durante un año y medio, ya que la etapa de lactancia es vital para su desarrollo, luego de ese período los padres deberán entregar al infante con un tutor externo.
.-¿Qué tal es la relación con el padre?
“Solamente me tiene a mí, soy su mamá y su papá”, comentó Ledesma.
.- ¿ Qué va pasar cunado a la niña le toque salir?
“No tengo familia aquí, pero tengo una buena amiga que me ayuda con la niña también y si es necesario en algún momento ella sería su tutora legal hasta que yo pueda salir de este lugar”, añadió.
La interna resaltó que a pesar de las circunstancias nunca pensó en abortar o en dar en adopción a su niña, expresó que ser madre no es nada fácil y el camino es más duro aun cuando estás encerrada.
Sin importar la situación la madre de 35 años mencionó estar muy contenta por la llegada de su hija, ya que es el pilar más importante para mantenerse de pie, hoy en día a Ledesma le hace falta dos años para cumplir su condena, quedar en libertad y empezar un nuevo camino.
Por otro lado, Leydi Gómez, de 24 años; cuenta con apenas un mes de embarazo; etapa que no planeó, pero mencionó que para ella la llegada de su hijo o hija es una bendición en medio de una oscura tormenta.
.- ¿Qué es lo más difícil de ser madre tras las rejas?
“Lo más difícil es estar en este lugar y no tener apoyo de mi familia, tengo mucha fe que cambie todo; lo que yo deseo, de salir de este lugar”, manifestó.
La madre de Leydi aún no sabe que está embarazada, pero espera que la apoye en cuanto lo sepa. La joven dijo que el padre de su bebé también es un interno; él cumple una sentencia de 21 años por homicidio, mientras ella tiene derecho a fianza, pero debido a que no cuenta con el dinero necesario, cumplirá una condena por dos años.
Destacó que hará todo lo posible para ser un buen ejemplo y darle la mejor calidad de vida a su bebé, también aconsejó a todos aquellas madres que estén pasando una situación muy difícil, seguir luchando, no dejarse vencer, ya que no hay obstáculo demasiado grande para derrumbar.
Con imágenes de Raymundo Labastida e información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.
