El séptimo mandamiento “no cometerás adulterio”

Este mandamiento nos obliga a respetar nuestros cuerpos y nos invita a seguir un camino que a veces es arduo y difícil, pero posible. Por lo cual, nos enseña a guardar y a cuidar la santidad del matrimonio y de la vida sexual.

REDACCIÓN VERACIDAD CHANNEL.

El séptimo mandamiento según ÉXODO 20:14 es “No cometerás adulterio”. En esta cita, Dios incluye en la palabra “adulterio” a todos los pecados sexuales que muestran deslealtad o infidelidad.

Este mandamiento nos obliga a respetar nuestros cuerpos y nos invita a seguir un camino que a veces es arduo y difícil, pero posible. Por lo cual, nos enseña a guardar y a cuidar la santidad del matrimonio y de la vida sexual.

En la Biblia, el término fornicación designa todas las clases de relaciones sexuales ilícitas, es decir, las que tienen lugar fuera del marco de un matrimonio válido ante los ojos de Dios. Por ello, este mandamiento es tanto para la mujer como para el hombre, y respecto a lo que dice la Palabra de Dios, quien la practique no recibirá la vida eterna 1 CORINTIOS 6:9.

Jesucristo explicó el séptimo mandamiento para mostrar el espíritu de la ley. En donde Él dijo que aún mirar lujuriosamente es adulterio mental: MATEO 5:27-29 “Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno”.

La Biblia nos dice que, el que practique la fornicación está pecando en contra de su propio cuerpo, el cual, debe ser templo del Espíritu Santo. Por ello, nos manda a huir de ella.

1 CORINTIOS 6:18 “Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca”.

En la Biblia, tenemos un excelente ejemplo de José, hermano de Dina, el cual, fue un jovenque amaba a Dios y supo huir de la fornicación. GÉNESIS 30:20-24

Cabe mencionar que, este es uno de los pecados que más daño espiritual, emocional, y físico hace, ya que, sus efectos se ven posteriormente manifestados.

El sexo es sano, puro y santo exclusivamente dentro del matrimonio, sin embargo, toda actividad sexual desordenada y sobre todo fuera del marco matrimonial es considerado pecado por Dios.