¿Nacemos con pecado?

El pecado es darle la espalda a Dios a causa de la corrupción del hombre. Esta terrible acción englobó grandes consecuencias, no sólo nos afecta a nosotros mismos, sino a quienes nos rodean, además nos condena a una vida vacía, alejada de nuestro Señor.

Pero ¿qué es el pecado?, es cualquier labor, sentimiento o pensamiento que vaya en contra de La Palabra de Dios. La Biblia dice que pecar puede es algo malo o injusto a los ojos de Dios.

1 Juan 3:4 “Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el pecado es la infracción de la ley”, ( RVR1960).

Santiago 4:17: “y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado”, (versión Reina-Valera 1960).

Pecar es vivir conforme a los deseos de nuestra carne, sin ningún temor al Señor. Entonces, ¿llegamos al mundo siendo pecadores?, la respuesta es sí, bueno, conscientemente no, pero es herencia de Adán y Eva, quienes esparcieron el pecado por el mundo.

Génesis 3:6: “La mujer vio que el fruto del árbol era hermoso, y le dieron ganas de comerlo y de llegar a tener entendimiento. Así que cortó uno de los frutos y se lo comió. Luego le dio a su esposo, y él también comió”, (versión Reina-Valera 1960).

Romanos 5:12: “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte paso a todos los hombres, por cuanto todos pecaron”, (RVR1960).

Adán y Eva habían sido creados perfectos, a la imagen de Dios. Sin embargo, dejaron de serlo cuando desobedecieron al Creador. Luego, tuvieron hijos a quienes les transmitieron el pecado y la imperfección como si fueran defectos heredados.

Caín fue el primogénito de Adán y Eva, también es identificado por ser el primer asesino en la Escritura, ya que le quito la vida a su hermano Abel.

1 Juan 3:12: “No como Caín que era maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué causa lo mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas”, (RVR1960).

Genesis 4:8: “Caín le dijo a su hermano Abel: Vamos al campo. Y cuando estaba en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel y lo mató”, (versión Reina -Valera 1960).

Así como Caín, nosotros también heredamos el pecado e incluso antes de salir de vientre, ya que a causa de la acción de Adán y Eva en el jardín de Edén fue afectado todo nuestro espíritu, alma y cuerpo.

Sabiendo todo esto, la única forma para salir de nuestra vida pecaminosa es creer que Jesús vino, murió y resucitó. A través de la fe en Él soy salvo, esto me llevará a conocer al padre, y a convertirme en morada del Espíritu Santo, para nacer de nuevo.

Marcos 12:30: “Y amarás al Señor tu Dios con todo tu Corazón, con toda tu alma, y con toda tu mente, y con todas tus fuerzas”, (versión Recobro).

Podemos nacer de nuevo abriendo brecha por medio de la Escritura, rompiendo la matriz y concebir sobre la roca que es Cristo Jesús. Uniéndonos a la tripulación y en oración, dejaremos morir a nuestro viejo hombre.

Romanos 5:21 “Para que, así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro”, (RVR19609).

Con información de Yajahira Valtierra, Veracidad News.